Los todistas son una raza en extinción: especialistas en no tener especialidades; estrategas en no tener estrategias; decididos a no tomar decisiones; carentes de vocación y el sentido especulativo de la conveniencia y la oportunidad. Seren, la señora que escribe en este blog, ha desarrollado, durante su amplio y diversificado paso por el todismo, todo tipo de diligencias laborales dignas de una pesadilla de Borges: lavaplatos, mucama, cartonera, canillita, empleada de veterinaria; barman, camarera, ayudante de sastre, vendedora ambulante, albañil, barista. Ella vendría a ser lo que en inglés se llama 'blue collar', o la gente que no tiene título universitario y desempeña tareas no profesionales. Esta mujer, como el resto de los todistas, tiene un sentido y comprensión estético mas bien ecléctico y difuso. No sabe la diferencia entre Barroco y Rococó; siempre supuso que Manet era Monet ( o viceversa ); o confunde el Art Decó con el Art Nouveau. Escribe con faltas de ortografía, se desentiende de la sintaxis, no entiende dónde van las comas; pero por otra lado, gusta de sacar fotos, martirizar relojes, ir a museos, visitar artistas y contar qué ve y cómo lo siente y experimenta. Señoras y señores, no los entretengo mas: Bienvenidos a Seren Vintage Watch Gallery

Carlos J. Otero - Albuquerque - New Mexico - USA: retablista

Los retablos son expresión viva y plena de cómo aún late el corazón de España en el arte tradicionalista de New Mexico. Los retablos nuevomexicanos suelen tener diferencias con sus primos mexicanos y españoles en el sentido que las tablas pintadas no tienen por qué formar parte de un púlpito ni estar en los estrados de las iglesias.
Los retablos de don Carlos J. Otero tienen esa belleza perenne y simple de la fé de aquellos que creen en sus santos, vírgenes y representaciones bíblicas con amor. Y es ese amor que se trasmite a la madera y pintura que forma estas obras magníficas muy dignas de sus raíces y se hunde profundo en la tierra de New Mexico.









  

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